Vampiros de todo el mundo
Esta
información fue sacada del Usborne Guide to the Supernatural World. Como
ya deben saber si leyeron la nota anterior(y si no léanla), los
vampiros tienen muchas formas y características dependiendo de su lugar
de proveniencia. O sea que no son iguales los vampiros de Europa
Occidental y los de Europa Oriental. En esta nota explico acerca de
algunas de las especies menos conocidas de vampiros y sus características. En
Europa había montones de versiones del mito del vampiro, en ciertos
lugares se creía en vampiros invisibles, en otros simplemente muertos
que salían a tomar sangre de sus familiares por las noches. En
Transilvania, actual provincia de Rumania, existía un vampiro
denominado murony. Este vampiro tenía la particularidad de poder
transformarse de un humano a un perro, un gato, un sapo o cualquier tipo
de insecto que se alimente de sangre. Esta forma le permitía atacar a
sus víctimas sin que estos se dieran cuenta de su presencia, ya que no
sospechaban de los animales. Cuando éste era descubierto, en su tumba
bajo forma humana, era reconocible porque sus ojos, sus orejas, su nariz
y su boca chorreaban sangre. El
vieszcy, era un vampiro ruso, con la particularidad de que se roía las
manos y los pies mientras estaba en la tumba, pero a media noche
escapaba para atacar al ganado, buscar sangre y sonar las campanas de la
iglesia. En Bulgaria, el vampiro tenía dos formas, durante los primeros
40 días de ser vampiro tenía un cuerpo como de película (me refiero
al film) que largaba chispas en la obscuridad, después de esto el
vampiro se alzaba de su tumba con su propio cuerpo, pero sólo poseía
una lengua larga y afilada y una única fosa nasal. En
Alemania existían tres diferentes tipos de vampiros, el neuntoter,
acusado de esparcir plagas, ya que su cuerpo despedía un olor fétido y
estaba cubierto de heridas. El Dracul era otro vampiro germano, que era
un cuerpo muerto que era vuelto a la vida por un demonio. Finalmente
tenemos al nachzehrer, el cuál poseía hábitos realmente extraños. Éste
se sentaba en su tumba, agarrando el pulgar de una mano fuertemente con
la otra, siempre mantenía su ojo derecho abierto, y hacía extraños
ruidos mientras devoraba su mortaja. En
otras partes del mundo, los vampiros tenían formas más fantasmales. El
ekimmu, de Asiria, era el fantasma de alguna persona que no había sido
enterrada de forma apropiada, y se volvían muy hambrientos y sedientos,
y como no se les daba ofrendas, bebían la sangre de los vivos, ver un
ekimmu era presagio de muerte. Los
aborígenes australianos, veian la sangre como fuerza de vida, por lo
que se la daban a los enfermos. Además le daban ofrendas de sangre a
los espíritus de sus parientes muertos en los velorios. Si esta no era
dada libremente los espíritus se enojaban y la robaban. En
África ocurría más o menos lo mismo que en Australia, solo que los
espíritus necesitaban la ofrenda como homenaje, que podía ser sangre
de animal pero sino se les daba se enojaban y volvían para esparcir
pestes y muerte por todo el lugar. Los espíritus se volvían más y más
enojados y requerían mayores sacrificios a medida que pasaban más
tiempo de muertos, al punto que podían regresar como feroces animales
come hombres. En
Asia los vampiros eran más bien demonios con formas humanas o no tan
humanas que se dedicaban a beber la sangre de los humanos. En Malasia,
existían varios tipos de vampiros. El pannaggolan era una cabeza
flotante de la cual colgaban sus intestinos y tripas, las cuales podían
ser usadas con suma destreza para ahorcar a sus víctimas, para luego
beberles la sangre. Los pennaggolan, también podían asumir forma
humana, pero al beber sangre sus tripas se hinchaban y no podían
mantener la forma humana hasta que les baje la hinchazón. El langsuir
era una mujer que retornaba de los muertos para beber la sangre de niños,
mediante un agujero en la parte trasera de su cuello (el de ella), y podía
asumir la forma de un buho. El polong poseía un tamaño no mayor al
dedo meñique de una persona. Este atacaba a la gente con la ayuda del
pelesit, un grillo demoníaco. Éste se enterraba en el cuerpo de la víctima
haciendo una entrada para el polong, el cual causaba una demencia
terrible y un odio hacia los gatos. El polong y el pelesit eran creados
por magia. El polong era hecho de la sangre de un hombre asesinado, que
había sido mantenida en una botella por una semana mientras que se le
lanzaban hechizos. El pelesit era hecho de la lengua de un bebé muerto.
Una vez creados, estos vampiros debían ser alimentados con sangre todos
los días. El bajang era un vampiro con la capacidad de tomar la forma
de un zorrino marrón o de una lagartija.. Algunos bajangs eran hechos
del alma de un niño recientemente enterrado que había muerto al nacer.
Un mago debía visitar la tumba a medianoche y persuadir al espíritu de
salir del cuerpo mediante cánticos de magia. Cuando alguien sufría de
una enfermedad desconocida, se sospechaba que un bajang lo había
atacado. Los principales síntomas del ataque de un bajang eran
desmallos y convulsiones. El modo de destruir a un bajang era encontrar
a su creador y destruirlo. Si el sospechoso se ahogaba en un río, se
decía que el bajang, en forma de lagartija escapaba a través de la
nariz de la persona que se estaba ahogando. Existen
muchas leyendas de vampiros en China, similares a las europeas. Se decía
que algunos eran demonios, mientras que otros eran cuerpos animados por
el alma original, denominada P'o. Se creía que estos estaban en la
tierra por un corto tiempo luego de muertos, cuando transformaban sus
cuerpos en vampiros. Todo cuerpo que no se pudría se decía que se había
convertido en un vampiro. Incluso los esqueletos o simplemente un cráneo
podían ser poseídos por demonios y vueltos a la vida. Los vampiros
chinos a menudo volaban o en otros casos comían otros cuerpos para
alimentarse.Los vampiros japoneses eran espíritus malignos que asumían
la forma de horrendos animales. Hasta se llegaban a asumir la forma de
sus víctimas humanas luego de esconder el cuerpo. |